¿Se puede conocer el modelo de juego de un equipo a través de los datos?

No cabe duda de que los datos han llegado para quedarse. No cabe duda de que la definición “modelo de juego” es la más variada de la historia reciente en el fútbol. No cabe duda de que el modelo de juego es el recipiente del estilo de juego de un equipo y que el líquido que lo contiene no deja de fluctuar constantemente. Por lo tanto, ¿se puede conocer el modelo de juego de un equipo a través de los datos?

La respuesta es sí. Muchas veces parece que el vídeo y el estudio de un colectivo a través del vídeoanálisis es la única forma de estudiar al equipo propio o al adversario, pero no es así. El dato debe concebirse como complemento y como suplemento. En otras palabras, el dato puede servir para reforzar lo que el ojo del analista ha observado o puede descubrir cuestiones novedosas que hasta el momento no se habían tenido en cuenta. En este último punto y bajo el término “descubrimiento” entra en juego la importancia que tiene el estudio cuantitativo con respecto al comportamiento de un equipo, ya que puede ayudar al analista a entender con una anticipación inteligente el funcionamiento del mismo.

Datos simples como la posesión o la cantidad de remates totales de un equipo deben estirarse de tal modo que, a través de otras variables, se pueda concluir cómo es dicha posesión y cómo es el rendimiento del equipo objeto de estudio en fase de finalización, entre otras muchas cuestiones. En definitiva, el cómo en el fútbol y en el entendimiento del juego es trascendental. El eventing ayuda mucho a situar a un equipo en su entorno competitivo, a entender qué equipos ostentan un modelo de juego similar o a conocer, con objeto de conciencia, cuáles son las figuras de identidad de un colectivo. Por ejemplo, relacionar variables sencillas como pueden ser los pases completados con los pases progresivos, en último tercio y en área rival puede ser una cuestión interesante, pero si además se generan dos ratios de progresividad y de trascendencia se pueden alcanzar conclusiones reveladoras de cómo está siendo el uso de la posesión de un equipo determinado.

Fuente: elaboración propia a partir de los datos extraídos de FBref-Stats Perform.

Para entender los matices citados, puede ser audaz dibujar alguna visualización que ayude a implementar un punto de encuentro entre la presente lectura y el lector desde un punto de vista práctico. Para ello, ‘robamos’ algún dato sencillo de www.Fbref.com -página web Open Data generada a partir del acuerdo firmado con Stats Perform- como la cantidad y la distancia concreta de los pases completados, los pases progresivos ejecutados, los pases realizados en último tercio o los pases en área rival, entre otros. A partir de ahí, se generan dos ratios interesantes de evaluación de la posesión de balón -plasmados en el tamaño de las barras verticales de los gráficos adjuntos; más gruesa mejor rendimiento-. Por un lado, en la primera visualización, se observa cómo hay equipos en La Liga como el Rayo Vallecano, el Club Atlético Osasuna o el Athletic Club que, sin ser de los que más pases completados -color azul- recogen, tienen una incidencia en último tercio y en área rival -color rosa- notables. Por otro lado e incidiendo en el mismo análisis, en la segunda visualización se observa cómo los tres equipos citados y, en especial, el equipo de Valverde también son de los conjuntos que más y mejor progresan -color rosa- en el juego a través del pase sin ostentar un porcentaje de posesión alto como el de otros equipos de la competición. En este punto también se pueden citar otros equipos como el Valencia o el Espanyol.

Seguidamente, es interesante ver si la eficacia en materia de finalización de cada uno de los equipos puede explicarse desde su correspondiente fase del juego para luego poderla ligar con la fase de progresión brevemente estudiada. Por ello, se observa un dashboard básico donde se recogen las relaciones entre los disparos totales y los remates a puerta, así como la cantidad de tiros a portería que se requieren por cada colectivo para marcar gol, entre otras variables. En este punto se pueden citar diversas conclusiones interesantes que no ostentan un patrón común como las siguientes:

  • Buena progresión en el juego, pero eficacia en finalización más débil -a pesar de estar consiguiendo marcar por encima de lo esperado- como es el caso del Athletic Club o del Rayo Vallecano.
  • Buena progresión en el juego y eficacia en finalización óptima e, incluso, marcando por encima de lo esperado como es el caso del Espanyol.
  • Progresión en el juego con menor trascendencia y una eficacia en finalización sobresaliente como es el caso del Barça, del Real Betis o de la Real Sociedad.
  • Progresión en el juego con muy poca trascendencia en último tercio, pero con una eficacia en finalización sobresaliente como son los casos del Almería y del Girona. Principalmente, este factor se debe a la increíble cantidad de remates totales y a portería que estos equipos realizan personificados en Leo Baptistao (2.49 remates cada 90′), Cristian Stuani (2.45 remates cada 90′), Largie Ramazani (2.35 remates cada 90′) y Valentín Castellanos (2.33 remates cada 90′).
Fuente: elaboración propia a partir de los datos de FBref-Stats Perform.

Cuestión similar ocurre si se atiende a los datos de la SD Ponferradina de hace dos temporadas, donde se observa cómo, a pesar de acumular pases en fase de construcción, es uno de los equipos de la competición que más y mejor progresa atendiendo al ratio de progresividad calculado. Por ello, tampoco sorprende que se encuentre situado el equipo leonés por detrás de dos equipos que ascendieron a La Liga Santander -Rayo Vallecano y Espanyol- en materia de los pases destinados hacia último tercio. En este punto, es relevante comentar que, desde un punto de vista individual, sus centrales y su pivote titulares durante la temporada 2020/2021 se situaron por debajo del promedio en pases totales, pero por encima del mismo en progresividad en el pase.

Por otro lado, el equipo del Bierzo llega bien a los últimos metros y obteniendo un rédito en materia de finalización positivo, ya que, sin tener mucha presencia dentro de área rival, consigue dirigir muchos disparos a portería. Dato que evidencia la convivencia de la SD Ponferradina con la portería rival, pero cuyos disparos son, en su mayoría, desde distancias alejadas desembocando en un ratio de definición muy negativo. Prácticamente ninguno de sus atacantes destaca o, mejor dicho, queda incluido en el grupo de delanteros centro con mejor índice de conversión -salvo Yuri-, pero sí que destacan en cantidad de disparos dirigidos a portería rival.

Fuente: elaboración propia a partir de datos de Instat.
Fuente: elaboración propia a través de datos de Instat.

A modo conclusivo, los datos ayudan a difuminar el juego de los equipos y permiten entender su situación en materia de rendimiento en un solo golpe de click. Es más, cada evidencia colectiva queda, a su vez, entremezclada junto a la justificación individual. Ahora bien, siempre quedarán cuestiones que serán evidenciadas a través del vídeo y a partir del visionado de las diferentes situaciones del juego bajo diversos factores del entorno, tanto interno como externo.

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